Tratamiento antibiótico
La enfermedad periodontal es una afección progresiva que conduce a una inflamación grave y a la pérdida de dientes si no se trata. Los tratamientos con antibióticos pueden utilizarse en combinación con el raspado y alisado radicular, curetaje, cirugía o como tratamiento independiente para ayudar a reducir las bacterias antes y/o después de muchos procedimientos periodontales estándar.
Existen varios tipos de tratamientos antibióticos, como las formas orales y los geles tópicos, que se aplican directamente en las bolsas de las encías. Las investigaciones han demostrado que en el caso de la infección periodontal aguda, la enfermedad periodontal refractaria, la enfermedad periodontal prepuberal y la enfermedad periodontal juvenil, los tratamientos con antibióticos han sido increíblemente eficaces.
Los antibióticos pueden recetarse en dosis bajas para un uso a largo plazo, o como medicación a corto plazo para impedir que las bacterias vuelvan a colonizar.
Antibióticos orales
Los antibióticos orales pueden afectar a todo el cuerpo y se prescriben con menos frecuencia que el gel tópico. A continuación se ofrecen algunos detalles específicos sobre distintos tipos de antibióticos orales:
-
Antibióticos de tetraciclina: los antibióticos que incluyen clorhidrato de tetraciclina, doxiciclina y minociclina son los principales fármacos utilizados en el tratamiento periodontal. Tienen propiedades antibacterianas, reducen la inflamación y bloquean la colagenasa (una proteína que destruye el tejido conjuntivo).
-
Antibióticos macrólidos – Este grupo de antibióticos ha demostrado su eficacia para reducir la inflamación y también puede reducir el crecimiento bacteriano asociado a la periodontitis.
-
Metronidazol – Este antibiótico se utiliza generalmente en combinación con amoxicilina o tetraciclina para combatir la inflamación y el crecimiento bacteriano en la periodontitis grave o crónica.
Geles y tiras tópicas
La mayor ventaja de la administración directa de antibióticos a la superficie de las encías es que no afecta a todo el organismo. Los geles tópicos y los métodos de administración directa tienden a preferirse a sus homólogos orales y son extremadamente eficaces cuando se utilizan después de procedimientos de raspado y alisado radicular. Estos son algunos de los antibióticos de administración directa más utilizados:
-
Atridox® – Este gel de doxiciclina se adapta a los contornos de las superficies de las encías y se solidifica sobre ellas. A lo largo de varios días, este gel libera gradualmente la medicación antibiótica.
-
PerioChip® – Este chip se coloca en la propia bolsa de la encía tras el alisado radicular. PerioChip® libera lentamente clorhexidina, un potente antiséptico antibacteriano. PerioChip® reduce la profundidad de las bolsas en la mayoría de los casos de periodontitis.
-
Actisite® – Esta fina tira es similar al hilo dental y contiene clorhidrato de tetraciclina. El hilo se coloca temporalmente directamente entre el diente y la encía para eliminar las bacterias y reducir la profundidad de las bolsas de las encías. A veces se colocan varios hilos durante unos 10 días para potenciar el efecto antibiótico.
-
Elyzol® – Este antibiótico metronidazol se presenta en forma de gel y tiras. Es único porque es capaz de destruir tanto los parásitos como las bacterias orales.
-
Arestin® – Este antibiótico minociclina se presenta en minicápsulas que se administran en las encías tras el raspado y alisado radicular.
Suelen observarse mejoras periodontales notables tras el tratamiento con antibióticos sistémicos u orales. Su Periodoncista o dentista incorporará y recomendará los tratamientos antibióticos necesarios para la curación de su enfermedad periodontal.
